El cuidado del medio ambiente es uno de los principales temas en la agenda de naciones, organizaciones no gubernamentales, empresas e individuos. Se trata de una preocupación que todos compartimos pues afecta directamente a nuestro bienestar y supervivencia. De hecho, resulta tan importante que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) señala a los problemas ambientales globales, como uno de los asuntos de mayor relevancia en el camino hacia un mundo mejor.
Sin embargo, existen múltiples problemas medioambientales sucediendo al mismo tiempo y, en ocasiones, resulta difícil seguir la pista de cuáles son los más urgentes. Por ello, en este artículo te compartiremos algunas de las principales dificultades ecológicas por las que atravesamos a nivel mundial, sus causas, así como algunas de sus soluciones. Estas son: el calentamiento global/cambio climático; sequía y la escasez de agua; deforestación y agotamiento de recursos naturales; pérdida de biodiversidad; así como la agricultura y alimentación.
Calentamiento global/cambio climático
El cambio climático se refiere a los cambios en las temperaturas y patrones del clima de nuestro planeta, particularmente a aquellos ocasionados por actividades humanas, como el uso de combustibles fósiles que provocan gases de efecto invernadero.
Este tipo de emisiones retienen la energía solar, que normalmente saldría de la atmósfera y elevan las temperaturas de la tierra. Estos gases, como el dióxido de carbono y el metano, han provocado una variación de 1.1 ºC en la Tierra, comparado con las épocas preindustriales.
Este aumento puede resultar menor para algunos; sin embargo, esto nos coloca muy cerca de un escenario posiblemente irreversible. Expertos en la materia señalan que un aumento en la temperatura de nuestro planeta de 1.5 ºC puede resultar en un escenario catastrófico y un punto de no retorno.
Por otro lado, no debemos dejarnos llevar por el nombre “calentamiento global”, pues aunque, en efecto, el planeta aumente su temperatura, esto no se ve reflejado en todas las regiones del mundo por igual.
Los principales efectos del calentamiento son los drásticos cambios en las condiciones climáticas de distintas zonas del planeta. Así, no debemos imaginarnos que éste sólo provoca sequías o calor extremo; también es responsable de huracanes cada vez más inclementes, inundaciones severas y tormentas invernales con mayor intensidad.
Otros efectos que el calentamiento global/cambio climático tiene son:
● Extinción de vida silvestre
● Escasez alimentaria
● Riesgos en la salud
● Pobreza y desplazamiento forzado
La principal manera de combatir el cambio climático es mediante la disminución de la emisión de gases de efecto invernadero y una de las mejores formas de lograrlo es a través del uso de energías limpias y renovables, como la solar, eólica, hidráulica o la biomasa.
Las industrias que adopten su uso podrán gozar de ventajas productivas y competitivas, como la seguridad energética y costos estables en materia de energía. ¡Se trata de una situación en la que todos nos beneficiamos!
Sequía y la escasez de agua
Debido a nuestro consumo, la huella hídrica de la humanidad –es decir, la cantidad de agua que requerimos para producir productos y servicios que satisfagan nuestras necesidades– es cada vez mayor.
En este sentido, la agricultura y la industria juegan un papel determinante, pues juntas consumen un 80% de las reservas de agua dulce del planeta. Esto no sólo se limita a la explotación de recursos hídricos, sino que también involucra la polución del agua que resulta de los procesos productivos.
Esto tiene consecuencias severas, como:
● Sequía y escasez de agua
● Problemas en la distribución
● Aumento de distancias para el abastecimiento de zonas urbana y/o industriales
● Agotamiento de los recursos hídricos subterráneos
● Reducción en la calidad del agua
● Salinización de los mantos acuíferos
● Secado de zonas húmedas
Esto tiene como consecuencias principales una falta de seguridad alimentaria, menor control de enfermedades, desaparición de especies vegetales, aumento en los conflictos geopolíticos.
Afortunadamente, son las mismas industrias las que están abanderando el cambio por un mejor planeta y evitar situaciones de sequía y escasez del agua. Mediante la implementación de tecnologías que ayuden a una mejor gestión en el tratamiento y gestión del agua tratada, las compañías podrán contar con operaciones eficientes, de calidad y rentables.
Dentro de estas soluciones ecológicas y productivas podemos encontrar:
● Desalinización de agua de mar
● Tratamiento de aguas residuales con tecnología de punta
● Reutilización y circularidad del agua
● Reuso de aguas residuales, depurándolas previo a su uso industrial
● Rehabilitación de aguas subterráneas
Deforestación y agotamiento de recursos naturales
Earth.org, plataforma de datos y noticias sobre el impacto ambiental, indica que cada minuto, en promedio, desaparecen bosques del tamaño de 20 campos de fútbol. Si este ritmo continúa, para el 2030 sólo tendremos 10% de las zonas forestales actuales.
Los actuales modos de producción y consumo han demostrado no ser sustentables. Al ser estos los que provocan una sobreexplotación y posible agotamiento de los recursos naturales, son las industrias y consumidores los principales encargados de adoptar medidas en contra de ella.
Algunas acciones que se pueden emprender desde los procesos productivos son:
● Reducir la cantidad de residuos resultantes mediante su aprovechamiento eficiente
● Aumentar la producción de energía renovable
● Adecuar instalaciones para el uso de energías limpias
● Implementar métodos para el tratamiento y reutilización de aguas residuales
● Gestionar de forma adecuada sus residuos
Los consumidores, por otro lado, pueden:
● Reducir el consumo de proteínas de origen animal
● Adoptar estilos de vida que reduzcan nuestra huella hídrica
● Preferir el uso de transporte público o bicicleta por encima del automóvil
● Cambiar hábitos de consumo de energía
● Cuestionar formas de consumo
Pérdida de biodiversidad
Los cambios en el clima y las modificaciones al medio ambiente debido a la explotación de recursos naturales provocan un decremento en las poblaciones de fauna silvestre a lo largo del mundo.
De acuerdo con el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF), existe una disminución promedio de 68% de casi 21 mil poblaciones de mamíferos, aves, anfibios, peces y reptiles estudiadas entre 1970 y 2016.
Aunque estos números suenan bastante alarmantes, no significan que estemos frente a una sexta extinción masiva de especies. Mediante esfuerzos de concientización y la adopción cada vez mayor de fuentes renovables y limpias de energía, todos podemos tomar parte en evitar la devastación de ecosistemas que son hogar de múltiples especies.
En 2020, la ONU estableció una estrategia contra la pérdida de biodiversidad mediante acciones como:
● Apoyo a la agricultura sostenible
● Reducción en el desperdicio de productos agrícolas del campo a la mesa
● Reducir la proporción de calorías animales en la dieta humana
● Aumentar la extensión de áreas consideradas como “protegidas”
● Aumentar la conservación de paisajes y territorios
Agricultura y alimentación
Los sistemas de producción de alimentos a nivel mundial son uno de los principales generadores de gases de efecto invernadero.
Por otro lado, además de que el uso de fertilizantes para producción de cultivos libera gases como el óxido nitroso, la agricultura también consume una gran cantidad de agua dulce; puntualmente, 3 cuartas partes de los recursos limitados de agua dulce.
Así, es momento de replantear soluciones para transformar nuestra alimentación y, con ello, los métodos de producción agrícola. Una de estas respuestas se plantea en la agricultura sostenible, la cual busca el equilibrio justo entre el cuidado del medio ambiente, el uso eficiente de recursos y el bienestar social, económico y alimenticio de las personas, por medio de:
● La prohibición del uso de fertilizantes de origen químico
● Rotación de cultivos para el cuidado de fertilidad del suelo
● Uso de métodos naturales contra plagas
Como nota adicional, es importante señalar que la agricultura es la mayor fuente de contaminación del agua, pues el contaminante químico de mayor presencia en las aguas subterráneas es el nitrógeno y sus derivados, procedentes de la actividad agrícola (como de fertilizantes o la excreta de ciertos animales).
Esto disminuye el nivel de oxígeno presente en distintos cuerpos de agua, lo que puede afectar a distintas especies marinas e impactar, incluso, en nuestra alimentación, pues amenaza a peces de consumo humano, como el atún.
En este espacio sabemos que los retos que enfrentamos en lo ambiental son muchos y variados, pero también sabemos que juntos podemos ser parte de una Acción Ecológica que beneficie al planeta y a nuestro desarrollo. Por ello, te ofrecemos información confiable sobre las formas en que es posible lograr el cambio que queremos ver, como nuestro eBook sobre eficiencia energética. Te invitamos a descargarlo, ¡es gratuito!